domingo, 26 de octubre de 2014

Cuerpo y mente.



Lo de la salud venía a cuento de una bronquitis que me provoqué sustituyendo mis ansias de libertad,  mi necesidad (temporal) de soledad, por el consumo de tabaco que quemo a diario. Este sería, a grosso modo, el diagnóstico de Thorwald Dethlefsen (licenciado en psicología) y de Rüdiger Dahlke (doctor en medicina y psicoterapeuta). Según sus investigaciones…. "No hay una diversidad de enfermedades curables, sino una sola enfermedad determinante del <<mal-estar>> del individuo". En su Libro La enfermedad como camino (Plaza&Janés, 315 páginas) analizan el significado de los quebrantos más habituales de la salud, con un lenguaje comprensible y continuas referencias y reflexiones de filósofos imprescindibles. Todos los síntomas tienen un sentido profundo para la vida de la persona: nos transmiten mensajes del ámbito espiritual, y de su adecuada interpretación dependerá nuestra capacidad de recuperación.

Así empieza el prólogo escrito por los autores:

"Este libro es incómodo porque arrebata al ser humano el recurso de utilizar la enfermedad a modo de coartada para rehuir problemas pendientes. Nos proponemos demostrar que el enfermo no es víctima inocente de errores de la naturaleza, sino su propio verdugo. Y con esto no nos referimos a la contaminación del medio ambiente, a los males de la civilización, a la vida insalubre ni a "villanos" similares, sino que pretendemos situar en primer plano el aspecto metafísico de la enfermedad. A esta luz, los síntomas se revelan como manifestaciones físicas de conflictos psíquicos y su mensaje puede descubrir el problema de cada paciente."

En el último capítulo formulan una pregunta que probablemente nos haríamos una vez llegados a ese punto:


- "Y ahora que ya sé todas estas cosas, ¿qué tengo que hacer para curarme? 
- ¡Abrir los ojos!" es la respuesta, según ellos.



NOTA: la palabras o frases en azul, en los textos, siempre son enlaces que complementan la entrada.


9 comentarios:

Sergio dijo...

Está claro que si no estas bien emocionalmente ya estás teniendo un problema de salud. Independientemente de que te duela algo físico. Creo que hay enfermedades psicosomáticas y eso ya está más que comprobado. La capacidad para autoconvencerse de algo pasa por enfermar. Puedes usar esa misma autosugestión para curarte. Los hospitales usan libros, televisión y música como parte de la terapia. También las visitas reguladas. El enfermo cura antes distraído que agobiado y aburrido. Eso ya dice mucho sobre nuestro cerebro y la salud.

karras dijo...

Tengo que hacerme con ese libro Volvo, comulga perfectamente con lo poco que he leido con muchos puntos de vista míos.
A ver si lo encuentro en segunda mano.
Besos y a mejorarse.

Esmeralda dijo...

Ufffff !!!!! el cuerpo y las enfermedades !!!!!
Muchas teorías...
algo habrá que hacer si nos queremos llenar el cuerpo de medicamentos....

Interesante post Volvo

tD++++b

Piruja dijo...

Hola volvo, en esto de enfermedades y medicos prefiero saber lo justito, de hecho ya he dejado de leer los prospectos por que si no no me tomo nada:), cosa que tambien me cuesta y tomo lo menos posible, aunque estoy de acuerdo que lo que nos pase en el cuerpo tiene mucho que ver de como lo hemos tratado, cosa de la mayoría de veces mientras nos encontramos bien no hacemos caso, luego lo pagamos con creces.
Espero que ya estés bien del todo, cuidate mucho:)

Besos.

José Núñez de Cela dijo...

Vivimos en un mundo enfermo ergo estamos enfermos . Pretender estar sanos no deja de ser una entelequia, una quimera que nos hacen perseguir, tanto las multinacionales farmacéuticas como los "sanadores verborréicos" Llevar nuestra "enfermedad" lo mejor posible es lo más parecido a (creer) estar sano.

... creo yo.

Saludos!

virgi dijo...

¡Uf, ese libro me lo recomendaron cuando estuve haciendo una dieta macrobiótica!
Creo que no tenía los ojos bien abiertos cómo para interesarme mucho en acabarlo.
Lo que puede decirte es que dejes el tabaco, anda, que mi pareja tuvo en días pasados una neumonía y lo primero que le preguntaron es que si fumaba.
Besitos, besitos, cuídate mucho.

Entre palmeras... dijo...

Mente sana, cuerpo sano.

Es definitivo que el estado de ánimo y nuestra mente pueden llegar a enfermar el cuerpo, incluso comprobado está que la depresión disminuye el sistema inmunológico del individuo, pero es tan difícil controlarla.

Abrazos muchos, Volvo

alfonso dijo...


Te diría que durmiendo perdemos muchas oportunidades de autocurarnos, a no ser que durmamos con los ojos muy abiertos.
Estoy muy de acuerdo en que somos nuestro propios verdugos, y que si la cara es el espejo del alma, la salud es un espejo tamaño armario ropero.
En fin, creo en las endorfinas y otras 'cosillas' susceptibles de inmunizarnos. El recurso a la enfermedad, como al exculpatorio, me parece que muchas veces encierra simple cobardía.

· VVRTSdCLRS

· CR · & · LMA ·


Noelia dijo...

Qué curioso el libro, me lo apunto en esa lista interminable de libros pendientes que probablemente nunca terminaré.

Me ha recordado a lo que hace algunos años una amiga me contó que no sé qué filosofía (disculpa mi mala memoria) hablaba de las horas del día asociadas a los órganos del cuerpo. Así que si por ejemplo te despertabas a las 3 de la mañana es que pasaba algo con tu estómago, o con tu corazón... o no sé con qué órgano vital. :-)

Opino que somos un todo inseparable, así que nuestras emociones interfieren en nuestra salud y viceversa.

Pd.- Qué demonio que es el tabaco!!!