lunes, 4 de abril de 2011

Pie de guerra.



He estado haciendo balance del pasado más próximo y me ha indignado llegar a la conclusión de que, en mucho menos de 30 años, este país ha pasado de la pobreza material al estado del bien estar, y nuevamente a la pobreza, esta vez de espíritu. Todo lo conseguido en la década de los ochenta, se ha esfumado, así, como el humo de un cigarrillo que se prendió con las reivindicaciones llevadas a cabo en su día, conseguidas a base de huelgas y persecuciones policiales, que disfrutamos durante unas caladas y se consumió cuando apuramos el placer hasta el filtro, sin considerar la posibilidad de que un cigarro encendido tiene un tiempo limitado de vida.

Periódicamente alguien nos recuerda que no podemos dormirnos en los laureles creyendo que lo bueno conseguido va durar el resto de la existencia.

En 1990, Sabina ya cantaba que los corredores de fondo, con sus melenas, sus camisas de cuadros y pantalones de pana, las minifalda y los pantalones de campana; la juventud de entonces era "…el hombre de hoy es el padre del mono del año 2.000…" Y así ha sido. Lo conseguido en poco más de una década se fue perdiendo en la siguiente generación. Una generación que se encontró con todos los deberes hechos, que no entiende de privaciones, ni de generosidad, ni de solidaridad, apática, indiferente y sin ilusión. Es la generación del me apetece o no me apetece; los pocos que protestan son llamados despectivamente extremistas, antisistema. Pues claro que son antisistema! El sistema ha ido rebajando los sueldos y ha aumentado las hipotecas, los artículos de consumo, y un larguísimo etc. que les impide iniciar una vida independiente y digna….
Ahora les toca a todos ellos, con nuestro apoyo, reivindicar y luchar por sus derechos, antes de que volvamos a la edad media…suponiendo que les apetezca.

En 2005, el flaco nos cantó Pie de guerra, un grito que considero una invitación a la acción pacífica; la lucha positiva que consigue mejores resultados sin derramar una gota de sangre. Lo mismo que ahora sugiere Stéphan Hessel con su manifiesto ¡Indignaos!


Las palabras en color (en las entradas) son enlaces.

20 comentarios:

Aniña (@vampyevil) dijo...

Aún asi se ven pocas protestas o me parece a mi.

sabores compartidos dijo...

Verdaderamente es preocupante la pasividad de los jóvenes de hoy. Pero más tarde o temprano no quedará otro remedio que volver a tomar las riendas porque si es cierto que los grandes señores tienen como única fijación acabar con el estado de bienestar para intentar someternos nuevamente con el pretexto de una crisis que ellos iniciaron y que todos estamos pagando. Creía yo (en mi ignorancia)cuando explotó la burbuja inmobiliaria que todo se iba a arreglar. Unas narices para mantener su propio estatus nos están jodiendo a todos. Vaya manera de empezar un lunes. Aun así un beso y pásalo bien.

Felipe Medina dijo...

He leído el libro, no más de unas treinta páginas,y terriblemente clarificador.

Después de tanto pelear nos han vuelto a ganar,los de siempre


Besos,Volvo

Belén dijo...

Demasiadas comodidades...

Besicos

Elena Lechuga dijo...

No nos da ni para indignarnos. Somos unos indignos.

luis dijo...

La verdad es que yo creo que los jóvenes lo tiene difícil. Incluso para organizarse y ponerse en marcha dado que no hemos sabido transmitirles ese tipo de inquietudes al no mostrarles un perfil claro de lo que es una sociedad y quien manda en ella. De todos modos la apatía no tiene muchas escusas. Yo espero que con todo este lio de los países africanos hartos de soportar injusticias, algo le llegue y comiencen a moverse para sacar a delante este futuro negro que nos han impuesto.
Saludos

interpreta-sones dijo...

lo he comentado recientemente, casi da vergüencita que tenga que venir un nonagenario a espolear a una juventud completamente amodorrada. indignémonos todos!

josé rasero dijo...

Aquí te dejo un enlace:

http://malestar.org/2011/03/12/4%c2%ba-jornada-estado-del-malestar/

Algo se mueve...

Besos!

Dean dijo...

Una entrada para enmarcar, me ha encantado. Hace apenas un par de días hablaba con un joven que me decía eso de "Es que no me apetece", y me daba la risa, porque en otras épocas era indiferente si era lo que queríamos o no, lo que importaba era hacer lo debido.
Un saludo.

bisílaba dijo...

Está claro, la economía es cíclica y vuelve en círculo sobre sí misma.

Un abrazo

belijerez dijo...

Yo observo como un colectivo de personas (clase obrera) ha sido maltratada, igual que a las mujeres maltratadas por marchistas, se le ha dicho que estaba formada, que no era competitiva, que no valía que no era productiva...esa gente maltratada incluso por los sindicatos UGT y CCOO fundamentalmente, estan bajo el maltrato y responden de la misma forma, se sienten, (a veces yo tambien me siento) culpable, frustrada, sin el impulso necesario para luchar.......es la consecuencia del maltrato ejercido.

Nos falta el apoyo real, nos an olvidado a cerca de 5 millones de personas. Nos han inscrito enlas listas del paro pero no han borrado de la vida de este país y esas son las concecuencias.

saludos.

belijerez dijo...

perdón quería escribir "machistas".

Nos borran de la vida, estando desempleadas.

Esilleviana dijo...

Por añadir algunas letras, tal vez insignificantes junto a tus palabras tan acertadas y pertinentes, hay grupos de jóvenes más activos y otros más pasivos, como en los años 70 y 80. Ahora hay muchos jóvenes comprometidos con muchas causas: solidaridad, la protección de la naturaleza, el voluntariado (en mi época -finales de los 80-, no conocía a ningún compañero/a que estuviera en algún grupo organizado para ayudar a toda clase de personas)... luego claro está, hay otros jóvenes que se desentiende de todo la problemática social. Pero observo muchos chicos y chicas que tienen ilusiones, esperanzas y el asunto económico en estos momentos está muy mal, no sé qué futuro les espera.

Me agradó tu reflexión, me hizo pensar y, la canción de Sabina formidable, es uno de los mejores, si no el mejor de todos los cantautores.

un saludo.

Olga Ricci dijo...

"Mientras la tierra gire y nade un pez, hay vida todavía"...Grande, sabio, loco, poeta, maravilloso Sabina!
Me fascina!
Besos australes amiga!

alfonso dijo...


· Yo... también en pie, todavía.
Este post debiera enmarcarse, al menos, si se lee completo, con calma, y con el enlace adjunto. Sobre éste... le hace sentirse a uno vivo, pensar que todavía hay una oportunidad para cambiar las cosas, de hacer que no sigan ganando los de siempre.

· Un beso, boreal, como las auroras.

CR & LMA
________________________________
·

Alberto Tallón dijo...

¡Grande Volvo, grande!

Entre las generaciones de jóvenes sigue habiendo gente con ganas de luchar, comprometidos, dispuestos a defender un mundo más justo... no són la mayoría, pero ¿cuando han sido mayoría?

Se les atribuye a los jóvenes actitudes que si nos fijamos bien, están presentes en todos los gupos de edades. La mayoría de la sociedad es apática, está desorganizada, és innactiva (salvo para consumir...), su actividad política se reduce a poner un papelito en una urna cada 4 años, etc.

Y así nos va...

saludos!

VolVoreta dijo...

Antes de nada, aclarar que cambié el enlace porque, en un principio, con menos tiempo, lo hice a la noticia que apareció en el País. Luego, buscando en internet, encontré el librito y me pareció interesante poder llegar hasta él, para quien no pueda adquirirlo, o echar un primer vistazo.


Esta entrada No desprestigia en absoluto a los jóvenes (y no tan jóvenes) que entregan parte de su tiempo a tareas de solidaridad, a protestas, etc. etc. Lo que pretendo destacar es que, hoy en día, con muchísimos más medios al alcance de la mano, no se aprovechen en conseguir el bien común.

Me indigna sobremanera que las llamadas a botellón y a partidos de fútbol (por poner un ejemplo) tengan más seguidores, y participación activa, que una llamada a manifestarse por la falta de empleo, la subida de la luz/gas, de las hipotecas, o la tomadura de pelo de las operadoras, el abuso de los bancos...

No creo en eso de que no hemos sabido transmitirles ésto o aquello... la mayoría lo vivieron directamente en compañía de sus padres. Otra cosa es que consideren que no tienen nada por lo que luchar porque creen que (aparentemente) lo tienen todo;no son conscientes de lo mucho que se ha perdido.

Todo es cíclico porque no se acaba de aprender lo importante de la Historia. Quizás habría que empezar esta asignatura por el último siglo, y no por la Prehistoria, que pocos llegan a la Universidad con conocimientos de la guerra civil y otras lindezas mundiales.

Los sindicatos de hoy en día no sirven mas que para poner zancadillas, son meros intermediarios...otro gasto más, totalmente prescindible.

En fin, que este tema da para mucho y sería un placer poder ampliarlo con una paella de por medio, bien regada con un rivera del duero, y carajillo...lástima que nos hayan quitado los chiringuitos de la playa!

Yo, no me siento culpable. Sigo aportando mi granito de arena en el día a día; que las patatas embolsadas vienen casi todas para tirar...las llevo donde las he comprado y se lo digo a la cara, aunque me tenga que oir eso de Uy, pues es la primera queja que tenemos...Ya me imagino, contesto, es que yo no lo hago por el dinero.


Gracias a todo por los comentarios.

Te dejo un beso.

sabores compartidos dijo...

Me he comprado el libro ayer ya te contare. Un beso

sabores compartidos dijo...

No me lo puedo creer, sólo he leído el prólogo y ya estoy INDIGNADO.

La Casa del Viento dijo...

Este mundo mundial trasgresor insolidario y redondo hace que nazca una flor en la primavera de un desierto en Libia, El Tunez o en cualquier parte.

Y el viento se la lleva volando sobre las bocas de los fusiles cruzando mares.

la vida sigue, hemos pasado por tiempos comprometidos con la dignidad, corrimos delante de los grises y hemos vivido.

No hay que pensar que son distintos nuestros jovenes aun duermen un sueño infantil, sueñan unidos a la teta, al movil y a la gasolina, pero poco a poco despiestan ante el nuevo capitalismo especulativo.

Y vendrán los sarracenos ( que son gente cojonuda ) y nos molerán a palos porque dios ayuda a los malos cuando son mas que los buenos.

Los tiempos cambian.

Desde el viento
Esteban Mediterraneo