domingo, 11 de mayo de 2008

Carmen


Ver llover hace que me sienta bien.

El agua que cae sobre árboles , rocas y tendidos eléctricos;
que resbala sobre los tejados y los cristales de las casas y acaba estrellándose sobre el asfalto salpicándome los pies;
que chapotea en los ríos y en el mar
que empapa los cabellos desnudos y la tierra acogedora...
Hace brotar el espíritu que habita en mí, lo lava y lo devuelve a mi interior libre de pecado: fuerte, fresco, sano ... y así sobrevivir los días de secano.

1 comentario:

Carmen dijo...

Querida amiga, te echaba de menos. Sabía que volverías, tú siempre vuelves, tú jamás te vas…
No sabes cuanto me alegro de que hayas creado este rinconcito mágico. Qué puedo decirte de él. Vas a ver lo libre que te vas a sentir teniendo un lugar donde expresar todo lo que tu voz no sabe o no se atreve a decir. Sí, esta es una muy buena terapia.
En tan solo dos entradas ya has dejado constancia de todo lo bueno y maravilloso que hay en ti, que es mucho… y esto tan solo es el principio.
Y esas fotos, esa tierra tuya a la que tanto adoro.
Y ese principio, ese recuerdo, ese amor eterno… verdaderamente precioso.
Respecto a esta entrada, MIL GRACIAS, me conoces bien. No puedo dejar de sonreír…
Bienvenida corazón. Ánimo, adelante, pasito a pasito, déjate llevar…
Gracias por dejarnos compartir un pedacito de tu alma…
Un besazo