miércoles, 18 de marzo de 2009

La Jardinera fiel

Relato IV



(el anterior)

El mes de marzo apareció en el calendario como un conejo salido de la chistera de un mago. Dónde había ido a parar el invierno? Se le había escapado, como arena entre los dedos, dedicando toda la atención a su madre enferma. Desde la operación se había trasladado a vivir con ella y ya habían pasado tres largos meses, sin intimidad, sin soledad, sin tiempo propio.

No puedo retrasar por más tiempo el cuidado de las plantas, pensó Ana recordando la lista de tareas pendientes, la primavera está al caer y las pillará tan desnutridas que no podrán ni asomar la cabeza por las rendijas de las ramas para tomar el sol.

Buscó un hueco entre la comida y la cena de aquel sábado más y subió las escaleras que la conducían a su casa, tan solo un piso de distancia y, sin embargo, tenía la sensación de que, los cuatro últimos años, aquellos escalones se había convertido en una rampa hacia la libertad.

Decidida a salvar la vida de su bosque desanimado, empezó a rastrillar con un tenedor la primera capa de tierra envejecida para, posteriormente, reponerla con sustrato recién desembolsado, lleno de vitaminas y oligoelementos que las harían resucitar.

Si me pongo un poco de música será más agradable, para ellas y para mí, se dijo casi entusiasmada.

Se frotó las manos dejando caer los restos pegados a su piel. Se acercó con paso relajado a la estantería de los CD. Hurgó entre los plásticos duros sin pensar demasiado y, abriendo el pulgar y el índice, cayó entre sus dedos “Emboscados”…lo cargó en el lector del iMac y Amancio Prada se puso a cantar con el mismo interés que si estuviese en el Teatro Campoamor de Oviedo.

” …Preguntaron por el agua de un manantial extraño para las heridas…”…”…prometieron volver mañana.¿Cuándo es mañana? No sé, mi amor. Nadie sabe.”…” La luz no siempre alumbra certidumbre, así la claridad cuando te falta. Su resplandor a veces siembra dudas y conmueve los cimientos más profundos.”…”¿No has sentido alguna vez el galopar de unos caballos en el pecho? ¿Qué extraño poderío levantó su aparición?”…

La música se iba trenzando melodiosamente con el poema, el poema se enlazó con sus sentimientos, sus sentimientos se mezclaron con sus pensamientos, sus pensamientos se fusionaron con sus recuerdos y…todos sus recuerdos batieron contra su pecho…

No había elegido bien…mientras sacaba la tierra desnutrida de la maceta notaba que estaba haciendo pucheros y enormes esfuerzos por no romper a llorar….pero ya era demasiado tarde. Su corazón había empezado a galopar al tiempo que sus ojos se vestían de agua salada. Buscó desesperadamente un pañuelo. Sin éxito, acabó, como siempre, en el cuarto de baño desenrollando el papel higiénico. Necesitaba un receso para desatar algún nudo de los tantos que acumulaba en el interior. Caminó sin rumbo por la casa, dejándose caer en el sofá como una marioneta que hubiese terminado la función.

Cuando su ánimo se calmó… recorrió el salón con la mirada buscando alguna señal que la animase a seguir con su tarea interrumpida.

Era nuestro hogar, sintió…ahora es mi casa (“si és que hi ha casa d’algú.”)…

Aquellas plantas medio mustias, desvitalizadas por la desgana se merecían una oportunidad…como ella.

13 comentarios:

Unknown dijo...

Todos nos merecemos otra oportunidad, nos merecemos ser felices...

Que hermoso regalo leer tus letras, que conmovedor relato... se me mete hasta el alma... imagino las plantas, que tras de lo mustio del invierno, son hermosas, exhuberantes... como esa orquidea con la que ilustras tu escrito.

Besos

Vitalnn dijo...

las oportunidades nos las damos nosotros mismos.

Gran entrada, Volvo!!!

Carmen dijo...

Busca la segunda oportunidad y... ¡aprovéchala!

Un besito y feliz día

Ana dijo...

Querida "Ana";

Si robaran el mapa del país de los sueños, siempre queda el camino que late por dentro.
Si te caes, te levantas,
si te arrimas, te espero.
LLegaremos a tiempo!

Mejor lento que parado,
desabrocha el corazón,
no permitas que te anuden la imaginación.
No te quedes aguardando a que pinte la ocasión, que la vida son dos trazos y un borrón.

Solo pueden contigo
si te acabas rindiendo
si disparan por fuera
y te matan por dentro...

TENGO MIEDO de que el miedo te eche un pulso y pueda más.
NO TE RINDAS, no te sientes a esperar.

Volvoreta,
Bellísimo post Corazón.
NO TE TRAGUES LA PENA porque no estamos muertos. Llegaremos a tiempo, Cielo, LLEGAREMOS A TIEMPO.

http://www.youtube.com/watch?v=W_etSAZ-fgM

Besos pintados.

alfonso dijo...

Con la mirada ausente...

Ay, Ay, Ay

... revoloteos por ese jardín

CristalRasgado & LaMiradaAusente
_____________________________

Anónimo dijo...

Todos tenemos derecho a tener otra oportunidad, aunque a veces no lo veamos.

Un abrazo

Eduardo Manzana dijo...

"el tiempo es aquello que hace que cualquier cosa,en todo momento,se nos escurra entre las manos....
y así pierda su valor."(Schopenhauer)...

gracias por tu regalo...
un beso.

Murphy White dijo...

Estamos llenos de oportunidades, aunque a veces nos empeñemos en no verlas. Me ha encantado leerte...

Gaby dijo...

Esto me a llegado Volvoreta..... Creo en el derecho a las segundas (y terceras y cuartas) oportunidades.
Pero también creo en el deber de posponer por algún tiempo la "vida" en razón a la lealtad familiar, cuando esta se a ganado a pulso.

Un beso enorme para ti amiga.

Carmen dijo...

Hola Volvoreta,
Paso de nuevo por aquí para desearte un lindo fin de semana.

Un besito!!!

Unknown dijo...

Me gustaria ponerte un post de esos bonitos que te pone tu gente, pero yo me expreso mejor con imagenes, ya sabes.

Solo decirte que me siento muy identificado con este post. Yo tambien pongo musica y ensucio mis manos con tierra cuando el sol empieza a calentar...

Un beso

Jose Antonio dijo...

Da gusto hacer la ronda del sábado y encontrar bellos post.

Saludos Cordiales

pizarrapilar dijo...

Precioso. Da gusto leerte.