domingo, 19 de julio de 2009

Sirena varada.


...
Y desafiando el oleaje
sin timón ni timonel,
por mis sueños va, ligero de equipaje,
sobre un cascarón de nuez,
mi corazón de viaje,
luciendo los tatuajes
de un pasado bucanero,
de un velero al abordaje,
de un no te quiero querer.
Y cómo huir
cuando no quedan
islas para naufragar
al país
donde los sabios se retiran
del agravio de buscar
labios que sacan de quicio,
mentiras que ganan juicios
tan sumarios que envilecen
el cristal de los acuarios
de los peces de ciudad.
...
mejor...si lo canta Sabina.

11 comentarios:

Jose Antonio dijo...

Así da gusto comenzar un Domingo.

Un Abrazo.

Capitán Clostridium dijo...

Volvoreta, ya le empezaba a echar de menos. Temazo de Sabina (como muchos de él) y espero que no conozca la siguiente versión, porque así le sorprendo: http://www.youtube.com/watch?v=Imh0vEnOMXU (me encanta)

Por si no lo vio en mi blog le rescato el homenaje o el canto a mi faro de guía, mi sirena:

http://circuloscerrados.blogspot.com/2009/06/mi-faro-de-guia.html

Espero que disfrutes ambos enlaces.

Gonzalo dijo...

Que gran letrista Sabina y tú, VolVoreta, que gusto recordándolo.
Un saludo de domingo.

Anónimo dijo...

El fin de la tristeza



«Tristeza não tem fin,
felicidade sim.»
Vinicius de Moraes



Se dejó caer con un suspiro de alivio en el sillón de plástico rojo.


Le dolía el cuerpo de tanto llorar y cuando la peluquera le pidió que alzara la cabeza, vio en el espejo unos párpados hinchados y enrojecidos y una mirada tan perpleja que casi no se reconoció. Habían pasado dos días, empezaba a pensar que el dolor la acompañaría siempre.


La peluquera peinó, estiró y sujetó el pelo con mano firme. Ella
cerró los ojos y sintió la tensión y cómo se aflojaba luego de derecha a izquierda, al ritmo metálico que marcaban las tijeras abriéndose y cerrándose, rápidas y sonoras, sobre el pelo mojado. Después se hizo el silencio, abrió los ojos y la peluquera le enseñó la mata de pelo negro, largo, brillante y húmedo.


Como lavado con sus lágrimas, pensó ella, triste aún.


–¿Lo quiere guardar de recuerdo? –oyó.


Y entonces respondió, casi sin querer:


–No, gracias. No hace falta. Volverá a crecer.


Y sonrió.

Berna Wang

- C -

alfonso dijo...

… con la mirada que lo desea…

Ninguna letra de Sabina tiene desperdicio. Buena selección.
Esa sombra en la roca rememora una venus germánica.

... Volteretas de Bolboretas

CristalRasgado & LaMiradaAusente
____________________________

Belén dijo...

El tema es seguir en el timón, pase lo que pase ...

Besicos

VolVoreta dijo...

Senovilla,
el agua estaba "divina".
Un beso.

Capitán,
gracias por los enlaces...me encantó el de tu sirena, cúidala mucho, son muy sensibles.
Un beso.

Gonzalo,
me lo pondría hasta en la sopa. cuando voy de viaje es lo único que escucho...me da revoluciones!
Un beso.

Catar,
"La tristeza no tiene fin, la felicidad sí"...me parece sublime.

...el pelo crece, sí :)

Un beso.

Ñoco,
...en este caso...galaica :) con Sabina hasta el fin del mundo.
VolVoretas reboltosas para tí.

Belén,
me aferro a él créeme aunque a veces no lo parezca.
A mí también me gustan tus besicos.
Besos para tí.

Dean dijo...

Me encanta Sabina, pero este tema no lo conocía. Gracias por estar ahí.
Un saludo.

Murphy White dijo...

Me encanta esa canción y más aún la foto con la que la has ilustrado. Preciosa.
Un beso

Alberto Tallón dijo...

¡Qué grande Sabina! todo un vividor... y genial la foto, ¡realmente parece la sombra de una sirena!

Un saludo!!

VolVoreta dijo...

Dean,
me alegra haber contribuido a que "lo conozcas" un poquito másUn beso.

Murphy,
es de las que más me gustan también, aunque no sabría decir cual me gusta menos :)
Un beso.

AlberT,
con un mp3 "relleno" de sus canciones me iría a una de esas islas perdidas, sin más necesidades que la de respirar.

La luz fue la responsable de la aparición de esa sirena...
Un beso.